Los frenos de las persianas alicantinas son opcionales. Sin embargo y para usarlas de una manera adecuada alargando además su vida útil y a la vez disponer de una total seguridad en su uso, son un complemento fundamental que deberíamos tener instalado. En esta guía rápida, te explicamos con sencillos pasos la manera de hacerlo.
Instalar el freno de retención de una persiana alicantina ya sea metálico o de plástico no precisa herramientas especializadas por la sencillez que tiene. Un pequeño martillo y un poco de intuición previsualizando el recorrido que ha de tener la cuerda antes de introducirla a través de ellos, son suficientes.
1. Alineando el orificio de salida del cordón de la polea con la cuenca superior del freno metálico podrás encauzar el trayecto del cordón a través de él
2. Usa la polea como referencia y fija con dos clavos o tornillos el freno al montante
1. Tira del cordón a través del orificio de la polea y alinéalo por encima del freno de pvc sujeto provisionalmente
2- Una vez alineado el cordón, ya puedes fijar la cajita del freno con los dos clavos al montante por sus orificios centrales.
Una vez instalado el freno, el siguiente paso es colocar el cordón correctamente.
Aquí puedes ver todos los accesorios de persianas alicantinas
Para el freno de pvc alicantina, simplemente se pasa el cordón por la abertura superior hasta que salga por la inferior.
Esta operación se realiza sin el tirador bellota, con el extremo de la cuerda libre, así que no olvides volver a introducirlo y hacer un nudo al final del cordón para que quede bloqueado el tirador
En el caso del freno metálico de persiana alicantina, el cordón se pasa a través de la pequeña pieza articulada con forma de estribo. El freno metálico es más apropiado para persianas de mayor peso o mayor tamaño.
